por @patyleiva, fotos: ZeroZen, fotos B/N: Rosario Oddó
Después de meses de trabajo, unas últimas semanas intensas y un viernes de pruebas de sonido y montaje, el sábado 5 de marzo llegamos cerca de las 9 de la mañana a la Fundación Cultural de Providencia para terminar los detalles de lo que sería el primer Ruidosa. Marineros hacía las últimas pruebas de sonido y luces, y los primeros fans ya estaban llegando para para asegurarse una buena posición frente al escenario que inauguraría Francisca Valenzuela más tarde.
Los stands se fueron armando hasta poblar por completo la terraza en la entrada del Palacio Schacht, hablando de derechos e igualdad, juntando firmas, mostrando sus talentos, vendiendo discos, libros y creaciones desde emprendimientos liderados por mujeres.
Las puertas del jardín se abrieron al mediodía -tan puntual como indicaba el programa y como resultó todo durante la jornada- y el show comenzó a la 1 de la tarde con Francisca Valenzuela saludando al público y estableciendo las bases de nuestra motivación como Ruidosa: la búsqueda de igualdad de género y no un trato de segunda clase, inclusión en todas las áreas, siendo la música el tema que nos convoca en este festival, y terminando con la clara idea de que ya no se hable de “música de mina” como si fuera algo malo, porque no lo es.
Cantó acompañada sólo de su teclado y su fiel público cantó con todas sus fuerzas cada canción. Valentina Payeras y Natisú se unieron como coro para interpretar preciosas versiones a tres voces. Después, Francisca dio el pase a Natisú con su proyecto en solitario, dejando claro que tiene mucho por entregar como solista.
Comenzó el primer conversatorio “Desde la música”, en el interior de la Fundación Cultural de Providencia. Más de 150 personas repletaron la sala para participar en el panel integrado por Camila Moreno, Denise Rosenthal, Javiera Mena y Francisca Valenzuela en una instancia poco común: compartir su experiencia como mujeres en el medio musical, en una sociedad y en un país donde el machismo sigue existiendo y reflejándose de manera patente en cosas grandes y pequeñas, de una manera que no estamos dispuestas a perpetuar.
Mientras las secas de Radio La Central nos sorprendieron con su transmisión en vivo de una calidad de streaming que nunca habíamos visto, desde las redes sociales de Ruidosa también intentamos transmitir el tono de la conversación, destacando en Twitter algunas citas como: “Hay una sociedad que avala que esto ocurra, que lo encuentra normal” (Camila Moreno sobre el abuso a las mujeres), “Cómo es posible que las mismas mujeres sean misóginas” (Javiera Mena dijo que se pregunta con sus amigas), “Si yo me visto así no es para provocar, sino porque yo me siento bien y cómoda conmigo misma” (Denise Rosenthal).
La música siguió con Paz Court en un ambiente muy relajado y buena onda en una perfecta tarde de verano en la ciudad. Había muchas mujeres en el público, amigas, pololas, mamás, hijas, y también hombres, porque por supuesto estaban también convocados a esta instancia de música, convivencia y reflexión, ya que como bien dijeron las chicas de Marineros en el cierre del festival, los hombres no son el enemigo, son un un complemento y ambos géneros son igual de valiosos en la sociedad. Eso es justamente lo que estamos buscando. Bienvenido el hombre feminista.
Camila Moreno se plantó a continuación en el escenario con una fuerza absolutamente consecuente con la persona que acabábamos de escuchar en el conversatorio, con ideas claras y fidelidad hacia su arte, hacia sus propias convicciones. ¡Puras campeonas en el escenario de Ruidosa!
A las 5 de la tarde comenzó el panel “Desde la industria”, donde la admirada Marisol García conversó con Carola Ozaus del colectivo Femfest (que lleva más de 12 años trabajando por la participación de las mujeres en la música), Carmen Barahona de Doll Music y En Órbita, Carla Arias del sello Quemasucabeza y Javiera Tapia de Potq. Marisol partió diciendo “Yo no recuerdo que se haya hecho en Chile antes una conversación de estas características” y todas compartieron experiencias desde discriminación en tocatas, la inquietud por transparentar información de la industria, y la valentía de hacer las cosas una misma aunque el entorno no parezca favorable.
La tarde tuvo otra oleada de público antes de comenzar el concierto de Planta Carnivora, única en su especie, se ganó al público que no la conocía echándoselos al bolsillo con su arrojo y naturalidad convirtiéndolos a todos en nuevos fans.
Fakuta siguió prendiendo al público con algunos de sus éxitos más pop, etéreos y bailables y la compañía de Carolina Espinoza (más conocida como Deplasticoverde) en el escenario.
El cierre estuvo a cargo del dueto Marineros, que iluminó la noche con su precioso montaje, creando una atmósfera perfecta para coronar un día realmente inolvidable.
Lo que vivimos el sábado pasado en Ruidosa fue una experiencia única: una jornada completa de música y presencia de mujeres increíbles en el escenario, en el público, en los stands y en los paneles. Agradecemos a todas su asistencia y participación, sin ustedes nada había sido igual de bacán.
Celebramos la idea de la Fran Valenzuela y su invitación a trabajar desde la concepción de este proyecto; nos enorgullecemos de nuestra participación en la organización y coordinación con Cazador, el equipo Frantastic y la importante participación de la Fundación Cultural de Providencia; comprobamos una vez más lo indispensable que es el buen trabajo en equipo, y aspiramos a que en todo ámbito las mujeres sigan haciéndose escuchar, y que se valoren por igual los esfuerzos, desaparezca la condescendencia y por supuesto el prejuicio y el abuso por ser de un género u otro.
Queda mucho por hacer. Ruidosa es un pequeño paso en nuestra lucha por la igualdad. Nos alegró mucho ver a más artistas participando también como público, y aunque hubiésemos querido que todas estuvieran en el escenario, nos pone felices demostrar que la escasez de presencia femenina en los carteles musicales no se debe a falta de candidatas. Eso es lo que queremos nivelar. En Ruidosa 2016 más de 7 mujeres pisaron el escenario dejando súper claro que talento hay de sobra.
Acá les dejo una lista con 14 horas de música de mujeres que armé para Ruidosa, tan solo una muestra de la música de niñas, de mujeres, de campeonas.
Aunque ganemos menos que los hombres, tengamos que andar mirando pa todos lados en la calle y aguantemos que otros nos pasen a llevar, me siento orgullosa de ser mujer… de poder ser ejemplo y construir un mundo mejor :)