Por Belén Leyton
Si quieres ver una película rara, debería ser “Bacurau”, dirigida por Kleber Mendonça Filho y Juliano Dornelles.
Esta película brasileña se estrenó en 2019, pero yo acabo de conocer su existencia. Y en un poco más de dos horas reúne una gran variedad de géneros. Creo que entre menos sepas, mejor, pero te dejaré un par de pistas.
“Bacurau” comienza con una joven, Teresa, viajando al pueblo en un camión de agua. Va al funeral de su abuela Carmelita, donde la recibe toda la comunidad. Hasta ahí todo normal. Es pequeño y alejado de las urbes. Pero un día comienzan a pasar cosas extrañas: llega una manada de caballos a mitad de la noche y se va la señal.
Bacurau es una película diferente
En esta película hay de todo: disparos, el pueblo desaparece del mapa, mucha sangre, fugitivos, tecnología avanzada, racismo, clasismo, corrupción. Mezcla géneros como ciencia ficción, fantasía, thriller, drama y acción.
Pero al menos hay un fuerte sentido de comunidad. Y al final se van resolviendo las dudas, aunque siempre queda un poco la sensación de “¿qué acabo de ver?”. Incluso me recuerda un poco al realismo mágico de Macondo, como ese lugar en el que todo podía suceder y nada era muy extraño. Después de un rato se acostumbraban a lo nuevo y seguían su vida como si nada pasara.
En el concurso que hicimos en instagram preguntamos de qué creían que se trataba. Aquí te dejamos algunas respuestas, que aunque divertidas, estaban bien lejos de la realidad: “Una asesina en serie”, “debe ser algo como una secta”, “una mujer que quiere proteger a su comunidad de los daños ambientalistas”.
“Bacurau” es divertida, sirve para pasar un buen rato y a la vez enfrentarnos a preguntas como cuál es nuestra comunidad, qué haríamos para proteger lo que creemos es nuestro y cómo la violencia se va normalizando a nuestro alrededor.
