Pangea

Entrevista a Camila Moreno, Pangea y su primer Caupolicán

Pangea
por @carodu
25 de mayo de 2018. Ese es el día en que Camila Moreno tocará por primera vez en un show propio en el Teatro Caupolicán, evento que representa el fin de un ciclo para ella, y cuyo principal objetivo es mostrar Pangea, proyecto que tiene como base el concierto que realizó en enero de este año en el Teatro Oriente, y donde la acompañaron otros artistas, como Gepe, Natisú y Fernando Milagros. De ahí surgen un disco en vivo y una película documental, que verán la luz el primer semestre de 2018.

¿Cómo defines a Pangea?
Pangea es un concepto, más que un disco, y tiene que ver con el fenómeno que ocurre cuando un continente interactúa con otros continentes para formar un súper continente, o una isla se une a otras islas para formar un súper continente, y eso a nivel sonoro significa que mis canciones han mutado, sobre todo en vivo, por la influencia de la banda y por la influencia que he recibido de las personas que han trabajado en el proyecto, así como iluminadores, productores, etc, y se ha transformado en algo que se ha escapado de mi control, obviamente bajo mi dirección, pero ha sido un proceso súper distinto a los discos en estudio, entonces se generó música nueva a partir de canciones que ya existían, y necesitábamos registrarlo, y necesitábamos registrarlo visualmente también, porque la puesta en escena ha adquirido una coherencia con la propuesta sonora que me tiene bien contenta, y esa es la parte concreta de Pangea, que finalmente es un colectivo. Pangea puede ser cualquier cosa, un sello, una empresa, un colectivo de gente trabajando alrededor de este proyecto y de esta música.

¿Qué importancia le das a tocar en el Caupolicán?
Es el concierto más grande que he hecho nunca, entonces eso adquiere importancias varias. El recinto es súper emblemático, he tocado varias veces ahí en distintos contextos, y es un buen lugar, que tiene mucha historia también.

¿Por dónde partes para armar este show?
No hay una metodología en particular. En este caso, el objetivo es mostrar Pangea en todo su esplendor, a nivel visual, a nivel sonoro, a nivel de puesta en escena, y eso es el punto de partida para mí.

Estrenaste también una versión en vivo de “Esta Noche o Nunca” junto a Gepe. ¿Cómo enriquece tu obra el trabajo con otros artistas?
Con la posibilidad de sorprenderse con cosas que uno ya hizo, que se transformen en otra cosa, que uno no tenía idea. Otra emoción, otro sentimiento, y en este caso, en “Esta noche o nunca”, el sentimiento se cristaliza súper bien en la voz de Gepe, sobre todo por su timbre vocal, y la sensibilidad que él tiene al cantar, porque se metió ene en la canción.

Eres artista, y mujer. Este año se han dado a conocer  varios casos de acoso en el medio artístico nacional y también internacional. En julio de este año publicaste una carta describiendo situaciones de acoso de las que has sido víctima, con el objetivo de generar reflexión y crisis, como tú misma expresaste en ese documento ¿Sientes una responsabilidad de hacer visible este tema?
Yo necesitaba expresarlo, y me sentía realmente harta de tener que dar explicaciones continuas de por qué el feminismo es algo importante y de por qué me parece un deber. Eso sí me parece un deber, más que la denuncia en sí misma, el feminismo como planteamiento humano. No debería ser algo que solo las mujeres llevemos adelante. El feminismo es algo que le va a hacer bien a la humanidad si es que se entiende a cabalidad, y con eso me refiero a partir de la base de la igualdad en los derechos y los deberes, de hombres y mujeres, y eso no es así hoy, y es lo que plantea el feminismo.

Lo que yo le planteo a mis cercanos es “vivimos en sociedades distintas, tú vives en una sociedad como hombre y yo vivo otra sociedad como mujer, entonces empecemos a comunicarnos, empecemos a empatizar desde la emoción, desde los sentimientos, desde la racionalidad, desde todo lo que uno es como humano”. Y esta conversación tiene muchas capas, muchas líneas de discusión, están la línea mega concreta de índices y de casos de femicidio, que son tremendos y son resultado de una cultura que concibe la realidad de una manera, y esa cultura es responsabilidad de todos, pero es una cultura heredera de una manera de pensar y heredera de una historia que viene desde la inquisición, según mi investigación. Y esa inquisición persiguió a las mujeres, no solo por ser mujeres, sino porque representaban algo, representaban una energía que tenía que ver con la posibilidad de contactarse con otras cosas que no son solamente materiales. Entonces, ese poder de la mujer, que viene en la menstruación, en los partos, ese poder que se produce incluso cuando se juntan, no le conviene al sistema capitalista, neoliberal, patriarcal actual, no le conviene que las personas estén conectadas con el lado femenino de la vida, ni los hombres ni las mujeres, entonces la manera de apalear eso ha sido físicamente dirigido hacia la mujer, pero el hombre también padece de esto, el hombre también es víctima del mandato de masculinidad que tiene esta sociedad.

Hablábamos del poder de la mujer, encarnado, por ejemplo, en la maternidad. En tu caso, ¿cómo te ha afectado el hecho de ser mamá en tu creación, en tu forma de ser artista?
En mi creación me ha afectado muchísimo, desde un plano concreto, porque tengo mucho menos tiempo para perder. Cuando no estoy con mi hijo, tengo que aprovechar el tiempo a concho, porque sé que después, mi hijo que es chico, me demanda ene energía, tiempo, sueño, mucho sueño. Eso por una parte concreta, y por otra parte, más emocional, me cambió mucho la perspectiva de la vida, de las cosas que son importantes, o que antes tenían más importancia y ahora tienen menos. En general yo siempre he creado desde el dolor, es fácil para mí conectarme, y canalizarlo, catalizarlo, cristalizarlo en una canción y sacarlo afuera, que ha sido un proceso para mi súper natural de hacer. Entonces, ahora que tengo esto, que es un tesoro, que es mi familia, de repente siento que estoy tan feliz, que no sé donde pararme para escribir. Aunque igual he escrito sobre el dolor, cuando mi hijo era chico, y el tema de la lactancia fue súper duro, el tema del parto claramente es un trauma, es crudísimo. Yo tuve parto natural, parí en mi casa, entonces vives todo, cada momento, cada instante, me dolió mucho, entonces es tan heavy, que yo me morí ahí, realmente me morí.

Ahora que ya ha pasado un poco de tiempo, cuando compongo estoy haciendo canciones que son un poco más felices, son un poco más positivas, entonces estoy todavía encontrando, buscando esa voz, no es una voz que yo conozca. Es súper interesante y estoy súper entusiasmada componiendo cuando tengo tiempo de componer, estoy en un territorio totalmente nuevo.

El concierto que Camila dará en el Caupolicán será el último antes de un receso indefinido de los escenarios, para dedicarse, entre otras cosas, a su vida familiar y componer. Las entradas ya están disponibles, y podemos encontrarlas a través del sistema Ticketek y sin recargo en Disquería Chilena (Providencia 1478) y en la boletería del Teatro Caupolicán. (San Diego 850).
Nos vemos en Pangea.