El brillo de Holly Golightly

Librosespecial
por Sur

Holly Golightly es un encanto de mujer. Eso dicen los que la rodean, los que la buscan, los que la miran. Ella, su ropa, su modo, su humor, son livianos… brillantes, como dice su vecino escritor que termina por enamorarse de ella.

Truman Capote crea un personaje sin igual en su novela “Desayuno en Tiffany’s”. Es el momento de la Segunda Guerra Mundial y Capote aloja su mirada de escritor en Nueva York. Pero no en cualquier parte de la ciudad, sino en la fiesta, en la risa, en el brillo de Tiffany’s que para Holly es un escape.

Holly Golightly vive en un mundo aparentemente vacío, con frases y filosofías pequeñas, que incluso parecen inmorales si se las ubica en la perspectiva del entorno social. Resulta obvio que el refugio del autor sea este espacio destellante, ya que en su propia vida él fue un personaje que pululaba por estos ambientes. Su excentricidad, su arrogancia y astucia fueron los imanes que encantaron a la sociedad norteamericana, pero hay que decir que esos mismos ingredientes acabaron por destruirlo y transformarlo en un tipo repulsivo. Capote retrata a la élite-jet set- farándula sin prejuicios. Sin anteponer la crítica que para otros intelectuales sería obvia.

(Este artículo –y mucho más– está disponible en la Edición Especial Aniversario Zancada, lo subimos también como post para no perdernos de tus comentarios)

Baja Zancada Especial Aniversario 2008 ahora.
Me imagino que el mismo escritor pudo conocer en una de las fiestas que asistía a una Holly como la de la novela. Este personaje, al igual que su creador, no pretende dar lecciones morales a su entorno. De hecho, parte de su gracia está en no pretender adoctrinar. Los temas morales y de comportamiento son obviados por Holly. La actriz cruza con belleza y naturalidad por todos los espacios librando siempre a favor. Ella atraviesa y le saca sonrisas a quien se le cruce, vive como una niña despreocupada en un mundo de adultos que sólo quieren protegerla.

Protegerla no significa necesariamente conocerla. El capricho de Holly contiene el componente del misterio. Se ha obstinado en guardar su pasado e incluso de no dar luces de su futuro. La placa de su departamento dice: Holly Golightly, viajera y eso evidencia la inestabilidad de la señorita. Ella no tiene ninguna intención de pertenecer a algún lugar y menos de pertenecerle a alguien. Todas las ideas sobre su gato, las jaulas y su familia van en este sentido. Fred aclara, en su total embobamiento, que Holly no es insensible, sino que está temerosa. Y ante la posibilidad de enfrentar sus miedos, mejor es ir a Tiffany’s a mirar los diamantes.

6 Comments

  1. Audrey es la actriz mas linda que jamas haya visto, y me encanta como trabajaba, pero cuando lei el libro senti que la pelicula le bajaba mucho el tono para ir mas con “su” tipo de pelicula (mas elegante, menos promiscua).
    De todas maneras recomiendo ambos, para hacer el contraste y para ver a la idola Audrey Hepburn!

  2. Me encanta el libro, Holly es un personaje precioso, aunque no he visto la pelicula me gusta imaginarme a Holly como Audrey H.
    Tengo en mi pieza un poster precioso en blanco y negro de la portada del libro

  3. fue interesante que cuando sacaron el especial Zancada justo esta leyendo el libro, ya habia visto la pelicula y ahora ya lei el libro…es linda Audrey como Holly

  4. Una vez leí por hay que el personaje de Holly lo iba a interpretar Marilyn Monroe, por suerte no fue así, ya que Audrey es tremenda y no imagino a otra persona personificándola, como que con el tiempo uno identifica al personaje con la cara de la actriz, así mismo cuando he leído un libro y luego hacen la película la mayoría de la veces me cuesta asociar cara y personaje, como en el caso de Keira Knightley como Cecilia Tallis en Atonement, mmm como que no era lo que esperaba, no así el caso de la hermana menor, ufff idéntica al personaje del libro.
    Siempre paso por zancada, pero nunca había posteado, así que aprovecho de felicitarlas por la pagina ;). Saludos.

Comments are closed.