“No tomo más”, esa promesa inútil

agua
por lucy

Cada día en que, como hoy, amanezco con caña, me digo a mí misma esa eterna mentira: “no tomo más”. Las ganas de no tomar más alcohol son auténticas, pero admito que duran poco. Muchas veces ese mismo día, más tarde, me ofrecen una cerveza que no puedo rechazar, mi organismo se equilibra y ya puedo volver a beber.

Igual no dejo de pensar en todo el tiempo útil que ganaría si de verdad cumpliera con esa promesa de caña mañanera, y en lo productivos que serían mis fines de semana si me acostara temprano y sin haber tomado.

Pienso en los libros que podría leer al despertar un domingo temprano sin dolor de cabeza, en las actividades que podría hacer con ánimo en vez de cara de poto, y en los kilos menos que tendría si no necesitara agregar una torreja de queso cheddar a mi pan del desayuno y en cambio saliera a trotar a la ciclorecreovía como la gente saludable…

¿Cuántas veces se han prometido a sí mismos “no tomo más” después de una caña real y/o moral? ¿Alguna vez lo han cumplido?

8 Comments

  1. Nunca he tenido que prometerme algo como eso porque soy capaz de medirme en lo que tomo y como. Tener la necesidad de autoprometerse algo así me parece un mal síntoma.

  2. Lo he dicho, lo he cumplido 95%.. Ahora bebo un poco cerveza o vino porque en realidad, no me gustan los destilados.
    Aunque de repente si tomo muy rápido igual me pega y al día siguiente me quiero matar, y es que el hígado ya no es el mismo que me acompañó en la época universitaria, nah que hacer!!
    La vez que más estuve sin beber fue en verano cuando estaba full dieta anti síndrome metabólico y el agua mineral con jugo de limón y hielo se convirtió en un gran apañador…Es rico salir y desperar sin caña!!

      • jajaja, no, pero de repente si te tomas por ejemplo una chela artesanal o alguna de esas belgas que de por sí tienen más alcohol que las normales con el estómago vacío es mucho más probable que entre agua al bote.
        Creo que en el último año he amanecido con caña re pocas veces, lo que incluye matrimonios bien bailados hasta abajo sin copete y despedidas de varios colegas que se portan pésimo….

  3. Yo casi nunca tengo caña, creo que tengo que tomar mucho para despertar mal. Creo que quizás la clave no es decir no tomo más ya que es es dificil de cumplir si no que tomar menos .

  4. Estoy to manado muy poco, donde vivo es basta te caro el copete y además la medida de alcohol por ley es ínfima en relación a el vaso 3/4 de alcohol de Chile. Ahora cada vez que bebo normal al otro día mi cuerpo se siente cansado y con una semi pesadez en la cabeza. Sí tomo más de la cuenta ya no es un día de caña sino que 2 y de esos heavy en qué hasta la luz me molesta. Debe ser que mi organismo se desacostumbro y/o ya estoy más vieja. Y pensándolo me gusta esto, porque cada vez que me siento acañada, pienso ok, para la próxima toma aún menos e intercalados con vasos de agua. Y así lo voy haciendo. Me ahorro ene plata, no engordo ni me siento inflada de calorías vacías y tampoco por el bajón, y no soy una zombi los días que le siguen a mi tomader y hago las cosas que tengo que hacer o al menos descanso en paz y no queriendome morir todo el rato. 10 años atrás jamás hubiera pensado así… Si, estoy vieja

  5. Hace años que me medí con el copete. Hace unos meses, y por otras razones, ya no tomo y la verdad es que no lo echo de menos.

  6. A mi me encanta tomar, pero mi cuerpo ya no lo tolera como antes, así que tengo que tener ene cuidado y medirme para no amanecer al día siguiente averiada…
    Lo que sí estoy intentando firmemente es no tomar los días de semana porque aunque sea poquito, entre la falta de sueño y el copete, al día siguiente no puedo rendir como me gustaría.

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