Por Sur
Somos todos culpables. Esa es la declaración que atraviesa el sexto y último capítulo de Years And Years, la miniserie inglesa que, ambientada a partir del año 2024, nos muestra un futuro cercano tan indeseable como posible.
La historia protagonizada por la familia Lyons es la distopía de lo que vendrá: de la política y el discurso instalados por la ultraderecha, de la depredación del medioambiente, de los avances tecnológicos que obstruyen la libertad, de la profundización de la crisis humanitaria de los refugiados.
Emma Thompson en el papel de Viv Rock sacude con su desfachatez, brutalidad y factibilidad. Su desprecio de la política, haciendo política, y su discurso es pan de cada día hoy por hoy, entonces no habemos de sorprendernos de lo puede venir, porque está siendo.
Llegó el momento en que los niños ultradigitalizados ya no saben que los aparatos alguna vez se enchufaron. Llegó el momento en que no hay polos, que tomar leche de vaca es sabidamente tóxico, que podemos subir nuestra conciencia a la nube.
En Years And Years pareciera que nos dimos vuelta el juego, pero al punto de colapsarlo. Vamos retrocediendo mientras creemos que avanzamos.
Aunque sin hacer adelantos, hay que decir, que para Years And years hay esperanzas. Aunque sea el cliché más usado, el amor es lo que nos transforma y nos salva.
Imposible no recordar a Björk en “All is full of love”.
